En todas las tradiciones siempre ha habido una ceremonia que marca la transición de un niño o una niña a la vida adulta.

En Italia ha tenido a menudo una connotación religiosa, pero en el extranjero este tipo de celebraciones se utiliza en las familias de inspiración laico-humanista.

Muy comunes en el norte de Europa, éstas vienen precedidas por encuentros en los que se habla de ética, de filosofía, de derechos civiles y los adolescentes discuten sobre sus ideas y sobre los valores que quieren que sean la base de su vida de adultos.

En Italia son casi desconocidas, pero podrían ser una ocasión importante para la familia para subrayar la mayor independencia de los hijos: independencia concedida, pero sobre todo conquistada.

Puede ser un momento para vivir en un grupo o dentro de la propia familia.

Como celebrante será importante conocer bien cuáles son los valores que han sostenido la educación de los niños, cuáles son las motivaciones que han llevado a los padres a pensar en una ceremonia como esta.

Puede utilizar dedicatorias o lecturas personalizadas; puedes crear un ritual personalizado. Juntos podremos construir un momento lleno de significado y que sea un estímulo para el crecimiento de los niños.