Rito funerario
- enero 20, 2022
- By Liana Moca
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Tener una ceremonia de saludo para una persona es la tarea más importante como celebrante.
Cuando el difunto ha expresado con fuerza su voluntad de ser saludado laicamente, es justo respetar este deseo suyo.
A veces alguien me pregunta: ¿pero el funeral es para quién muere o para quién se queda? Creo que es para ambos. Si una persona que os amaba os ha hecho comprender siempre que quería un rito laico, es un acto de respeto hacia ella organizar la ceremonia que deseaba.
Como celebrante, os ayudaré a hacer este momento de saludo lleno de significado y respetuoso para todos.
Es importante que todas las personas se sientan involucradas y puedan compartir la despedida.
No hay ritos preestablecidos, no hay lugares designados, la única cosa importante es hacer el rito digno y verdadero.
¿Cómo funciona?
Normalmente me contacta la funeraria, a veces me busca la familia o los amigos del difunto.
Durante la primera entrevista, que suele realizarse por teléfono, se establecen las modalidades más importantes: el lugar, el día y la hora y luego se intenta buscar el momento adecuado para una reunión.
Visito los familiares y amigos para poder hablar con ellos. Les pido que me expliquen las razones para elegir un funeral laico, luego trato de entender quién era el muerto, les pido que cuenten episodios de su vida.
Hago mi trabajo, siempre teniendo en cuenta la situación a la que me enfrento: es fundamental gestionar este momento con extrema atención y un gran respeto hacia todos.
Después de reunir estos elementos, escribo la ceremonia. El texto será un tributo a la vida de la persona que se ha ido, devolveré los valores que han animado su vida e intentaré contarla con extrema corrección y sinceridad.
Incluiré dentro del texto poemas o lecturas elegidas junto con la familia o algunas canciones que le gustaban al difunto.
Será mi preocupación enviar el texto para su visualización a familiares y amigos: este es un paso importante, porque solo ellos conocen en profundidad las sensibilidades de los presentes y es justo que el texto sea respetuoso para todos.
En el momento de la ceremonia, estaré presente en el lugar donde se llevará a cabo la ceremonia y colaboraré con la funeraria, para garantizar que todo se desarrolle con tranquilidad.
"Fuiste capaz de explicar cómo funcionaba en tan poco tiempo y nos llevaste de la mano, ayudándonos en un momento tan difícil. No lo olvidaremos". A.
¿Dónde puede tener lugar un funeral laico?
Si el ataúd está cerrado o hay una urna funeraria, el funeral se puede realizar en casi cualquier lugar. En los últimos tiempos se han abierto varias instalaciones privadas que se pueden utilizar para este fin.
Estos son algunos ejemplos:
– En el jardín de la casa;
– En el cementerio;
– En una sala de despedida laica, privada o pública;
– En el jardín de un restaurante/location para ceremonias;
– En una sala abierta al público. A menudo los ayuntamientos ponen a disposición teatros o salas municipales;
– En la sala del crematorio.
La música
En los funerales laicos no hay límites en la elección de la música. Por lo general, se eligen las canciones que le gustaron al difunto.
Se puede elegir música clásica, rock o pop. Se puede pedir a alguien que lo reproduzca en vivo o que busque canciones grabadas.
La familia puede indicar cuáles pueden ser las músicas más queridas y evaluar si se pueden utilizar en el lugar donde se celebrará la ceremonia.
Las lecturas
Durante la ceremonia puede ser apropiado escuchar los versos de algún gran poeta o una reflexión en prosa.
El pasaje puede ser leído por un familiar o un amigo.